Cuando estoy con mis pacientes desarrollándoles la dieta a seguir, es curioso lo que opinan respecto a los aceites. Para la gran mayoría, es el aceite de oliva el que menos engorda. Algo que no es cierto. Todos los aceites engordan lo mismo: 9 calorías por cada gramo. Y esto es válido para tanto para el el de oliva, como los de maíz. maravilla, canola, pepita de uva, etc. De ahí que les recomiendo usar el que sea de su gusto pero en la menor cantidad posible.
aceiteimagesConviene recordar que en relación a la salud, los mejores aceites que actualmente se venden en nuestro país son los de oliva y de canola. El aceite de oliva es el que contiene la mayor concentración de ácidos grasos monoinsaturados que son un tipo de “grasas buenas” que protegen a las arterias impidiendo el desarrollo de la aterosclerosis en las paredes de estas. Además, el aceite oliva contiene tirosol, un potente antioxidante de la familia de los polifenoles. La principal acción de el tirosol es impedir que el colesterol malo, el LDL, se deposite en la pared de las arterias. Vemos entonces que el aceite oliva posee una acción dual respecto a la protección de los infartos.
El aceite de canola es el que contiene la mayor proporción de omega 3. Estos corresponden a un tipo de ácidos grasos esenciales para la buena funcionalidad de los tejidos del cuerpo humano. El omega 3 posee muchas acciones positivas para nuestro organismo. Entre estas, destacan: la reducción en la formación de trombos arteriales y venosos, la protección de las arritmias del corazón, y facilitan una mejor función de las neuronas del cerebro. Estos efectos no sólo se aplican a los adultos, también a los niños, bebés e incluso al feto en desarrollo en el vientre materno. Hoy existe un consenso de administrar omega 3 a las mujeres embarazadas y en lactancia.
Que el aceite de canola y el de oliva sean buenos para la salud, no significa que puedan usarse libremente, ya que engordan igual que cualquier otro aceite. El consumirlos en exceso favorecería el desarrollo de la obesidad.