“Caldo Mágico” contra los Resfríos y la Gripe

Hace unos años publiqué en este sitio una sopa que actúa como un excelente medicamento para ‘sanarse’ de las enfermedades respiratorias, tan frecuentes en esta época del año.Se trata de un caldo de pollo, con cebolla, pimienta y ajo. No sólo sirve como tratamiento prevención de los cuadros respiratorios, también es de bajas calorías. Lo que la hace muy útil en las personas que están a dieta.

serving of lentil chicken soup

 

Sus ingredientes son: 3 litros de agua, 1 pollo entero (con piel), 6 cebollas, pimienta entera y ajo. Se hace hervir todo hasta que el pollo esté casi deshecho y la cebolla bien cocida. Luego se retira el pollo y el caldo se deja enfriar para que la grasa del pollo suba a la superficie, para quitarla y botarla.

Esta sopa posee propiedades antiinflamatorias, descongestionante, fluidificante de las secreciones (mucolítica), mata los virus y aumenta las defensas (por sus componentes antioxidantes).

  1. El pollo: Al calentar por largo tiempo el pollo, se van liberando proteínas. Las proteínas están formada por unidades más pequeñas: los aminoácidos. El aminoácido que nos interesa es la cisteína. La cisteína es la base de la acetilciteína y de la carboximetilcisteína, ambos son componentes que usa la industria farmacéutica para elaborar medicamentos que se usan para tratar las bronquitis y otros cuadros respiratorios.
  2. La cebolla. Posee una excelente actividad antiinflamatoria, descongestionante y mucolítica. Es decir, ayuda a adelgazar las secreciones del aparato respiratorio para que puedan ser fácilmente eliminadas. Además contiene quercetina, un potente antioxidante natural que ayuda con las defensas del cuerpo.
  3. El ajo. Contiene alicina, conocida también como la ‘penicilina rusa’. Su acción es matar los virus que causan los resfríos e incluso la gripe. Estudios han demostrado que la alicina elimina a cerca del 90% de los rinovirus que son los vius responsables de los resfríos, y también a los virus parainfluenza 3.
  4. La pimienta. Es un excelente descongestionante. Contiene capsaicina, que aún se emplea como base en algunos descongestionantes que se venden en farmacias. También contiene cisteína que comenté en un párrafo anterior.

La acción descongestionante y mucolítica de esta sopa se ejerce de la siguiente manera. A medida que el caldo va pasando por la faringe, amígdalas (si las hay), esófago y estómago; sus diferentes componentes actúan en los receptores que envían las señales hasta el cerebro, quien a su vez responde aumentando la secreción y la fluidez de las glándulas que producen mucus. (Esto explica también porque se llora al picar cebolla, al comer wasabi o raíz picante).

Importante es que esta sopa debe comerse caliente y lentamente, dado a que el efecto dura sólo unas horas. Ideal es servirla en potes de greda, ya que conservan por mas tiempo el calor. Otra cosa a considerar es evitar la leche, ya que frena las acciones de este caldo, poniendo más espesa las secreciones, y al dejar una delgada capa por la superficie del tubo digestivo, impide la activación de los receptores nombrados anteriormente.