
Es cierto que las espinacas contienen bastante hierro, pero ¿Cuánto de éste se absorbe?
No hay duda que el hierro es imprescindible para la formación de glóbulos rojos, los que transportan el oxígeno que respiramos a cada célula de nuestro cuerpo.
La disminución de glóbulos rojos (anemia), provoca un menor aporte de oxígeno a los músculos y cerebro. Explicando así el cansancio propio de esta enfermedad.
Importa señalar que una cosa es la cantidad de hierro que contiene un alimento y otra cosa es la absorción de este hierro por nuestro organismo. Es lo que conoce como “biosdisponibilidad”.
El contenido de hierro en las espinacas es significativo (ver tabla 2). Pero la biodisponibilidad de este es pobre (apenas un 2 %). En general el hierro de los vegetales se absorbe poco. Y esto se debe a que contienen elementos que dificultan la absorción de este mineral. Como el ácido fítico (legumbres, cereales integrales), el ácido oxálico (espinacas, acelgas, betarragas), taninos (vino, café y te).
Las carnes, mariscos, pescados y pollo, no sólo contienen una elevada cantidad de Hierro (ver tabla 1), también se absorbe mucho mejor.
La absorción del hierro de la carne y pescados es del 30%. Del huevo, un 7%. Siendo la leche materna la que tiene la mejor biodisponibilidad (50 a 70%).
Existen otras situaciones que también afectan la absorción del hierro. Es el caso de la cirugía bariátrica. También los medicamentos que reducen la producción de ácido del estómago como el omeprazole y esomeprazol. El calcio también dificulta su absorción, por lo que en los suplementos es mejor tomar a diferentes horarios el calcio y el hierro.
Mientras que la vitamina C aumenta la absorción de este mineral.

